Este término suele emplearse para calificar al material que tiene resistencia al fuego y a las altas temperaturas. Usar materiales ignífugos en una construcción naves, locales y viviendas, supone una protección ante un eventual incendio.
Por lo general un material ignífugo retarda los efectos del fuego, estos materiales son la vermiculita y la pintura intumescente.
Cuando se trabaja en naves industriales a la hora de ignifugar la ley obliga a poner barreras cortafuegos de 1 metro de anchas con todos los colindantes a la nave.